Kronos Quartet: obras de Penderecky, Oswald, Zorn, Anderson y Café Tacuba, entre otros

 

 

Kronos Quartet

 

Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo

Sábado 15 de septiembre de 2013, 20:00

 

 

Krzysztof Penderecki (Polonia, 1933)

Cuarteto de cuerdas no 1 (1960)

 

John Oswald (Canadá, 1953)

Spectre* (1990)

 

Alter Yechiel Karniol (Polonia, 1855 – Estados Unidos, 1929) (arreglo de Judith Berkson)

Sim Shalom+

 

Clint Mansell (Inglaterra, 1963) (arreglo de David Lang)

Suite de Requiem for a Dream + (2000)

I. Ghosts of a Future Lost

II. Meltdown

III. Lux Aeterna

 

John Zorn (Estados Unidos, 1953)

Selecciones de The Dead Man* (1990)

Nocturne

Fantasy

Prelude

Etude

Manifesto

Meditation (The Blue Noon)

 

Ramallah Underground (arreglo de Jacob Garchik)

Tashweesh* (2009)

 

Laurie Anderson (Estados Unidos, 1947) (arreglo de Jacob Garchik)

Flow+ (2001 – 2010)

 

Café Tacvba (México, 1989) (arreglo de Osvaldo Golijov)

12/12* (2002)

 

INTERMEDIO

 

Richard Wagner (Alemania, 1813 – Italia, 1883) (arreglo de Aleksandra Vrebalov)

Preludio de Tristán e Isolda*+ (1865)

 

Jerry García (Estados Unidos, 1942 – 1995) (arreglo de David Lang)

What’s Become of the Baby?+ (1969)

 

Bryce Dessner (Estados Unidos, 1976)

Tenebre* (2010)

 

*Compuesto para Kronos / +Arreglado para Kronos

 

Notas al programa

Beethoven es una figura cabalmente romántica. Aún si no toda su música encaja dentro de ese movimiento artístico europeo de antes de la primera mitad del siglo XIX, su prestigio se debe no solo a sus composiciones, sino también a su tenaz lucha contra la sordera y la depresión y también a su condición de músico independiente, no ya el empleado de escaso rango en alguna corte como correspondía hasta el momento, sino como un artista de igual valor al de un literato como Goethe o Schiller, por ejemplo. Wagner, en cambio, se nos presenta de inmediato a la luz de sus contradicciones y defectos, con más evidencia que Beethoven. Ambos cambiaron el curso de la música europea, Beethoven, en el paso del estilo clásico al romanticismo ocurrido entre finales del siglo XVIII y mediados del XIX. Wagner, quien transformó la música europea del último tercio de su siglo, sintió por la obra de Beethoven una fascinación que compartió con su generación y con compositores como Schubert y Schumann, admiración musical que le llevó a imitarlo sin mayor trascendencia y a querer emular, ya no romántica, sino posrománticamente, la figura del autor como héroe de su propia obra, o mejor, como el héroe detrás y por encima de su propia obra. Para mediados del siglo XIX, el período que los historiadores denominan como la Era de las Revoluciones, alcanzaba su punto más intenso. París se levantó en 1848 y estableció una Comuna que el revolucionario de la poseía que fue Baudelaire, censuró como un conservador en temas sociales. Para ese entonces Alemania estaba todavía lejos de consolidarse como un estado, pero la nación alemana, un pueblo identificado por una lengua y una historia común, se manifestaba en términos unificadores y nacionalistas. Wagner tomó parte en las revueltas de Dresde, la ciudad en donde vivía y a la que debió abandonar para iniciar sus sucesivos exilios por razones de policía o de deudas. Wagner nació en el barrio judío de Leipzig y más adelante recibió el estímulo, la promoción y el soporte del compositor judío Meyerbeer. Esto no le impidió que, en un período en que escaseaban los ingresos y todavía no se establecía como el genial compositor y dramaturgo que fue, escribiera unos textos antisemitas sobre música. Los textos fueron luego aprovechados por el nazismo que además se identificó con la obra de este compositor. En sus textos, Wagner degradó el aporte de los judíos alemanes a la construcción de la nación alemana y no tuvo reservas en descalificar al poeta judío Heine, a pesar de haberse valido de su obra, que Wagner admiraba, como inspiración para sus propias composiciones. En vida de Wagner, Hermann Levi, un judío hijo de rabino y a quien el compositor trató de convertir al cristianismo, figuró como el director del estreno de su Parsifal. Wagner tampoco fue leal a las mujeres por las que se interesó y queda siempre la posibilidad de especular si el interés por ellas era tan genuino como la posibilidad de ascenso social y dinero que se asociaba a ellas. Tal es el caso de la hija de Liszt, Cosima, casada con el director von Bülow, quien dirigió obras de Wagner. Cosima y Wagner tuvieron tres hijos antes de que von Bülow accediera al divorcio y aún después de este, continuó dirigiendo obras de Wagner.

Para el inicio de la representación de las óperas de Wagner en su propio teatro de Bayreuth se hace total oscuridad y solo la música importa. De las tinieblas va surgiendo el preludio o la obertura y cuando el público ya está en el ambiente emocional que Wagner diseñó, comienza a hacerse la luz para dar inicio al drama con texto y música de Wagner. Se trata de la obra de arte total en la que todo se suma e interactúa para tener un balance artístico de lo más elevado. Sin embargo, la fotografía, de la que ya Wagner fue sujeto, todavía no se tenía como una disciplina artística y cuando lo consiguió, faltaba aún la llegada del cine y más aún la del video y la electrónica, para tener paulatinamente obras de arte con mayor contenido de totalidad. En lo musical, Wagner se valió de un uso marcado del cromatismo con su efecto de desdibujar la tonalidad como centro estructurador de sus obras, en el aspecto formal. Además, equilibró en sus óperas elementos como los decorados, la acción escénica, los textos que él mismo escribió, el uso de total oscuridad y el manejo de luces, junto con la música misma, como un conjunto cerrado y totalizador para cada obra. Hacia sus últimos años, sus mayores ocupaciones al frente de su teatro de la localidad bávara de Bayreuth absorbieron todo su tiempo, dejándole muy poco margen para escribir, en contra o a favor de determinados aspectos de la música. Tampoco tuvo oportunidad de reiterar sus posturas antisemitas ni de seguir involucrado en asuntos de política revolucionaria. Es cierto también que su situación financiera a la que se sumaba un balance contable en contra por cuenta de los exigentes montajes en Bayreuth, le absorbieron buena parte de sus energías.

El arreglo para cuarteto de cuerdas del preludio de la ópera Tristán e Isolda es obra de la compositora serbia Aleksandra Vrebalov cuya relación con Kronos se extiende igualmente al CD Kronos Caravan de 1999 en el que este cuarteto grabó su obra Pannonia Boundless. El CD Floodplain de Kronos, puesto en circulación en 2009, contiene una pieza de Vrebalov, de casi 22 minutos de duración. También le correspondió a Kronos estrenar en 2011 Babylon, Our Own, de Vrebalov.

En la tradición litúrgica judía resulta importante la presencia de un cantor que embellezca y ornamente la cantilación que acompaña los textos rituales. Hoy se encuentran cantores que han seguido una formación musical académica, pero durante siglos el oficio llegaba por el puro reconocimiento de unas dotes que se cultivaban en la práctica y en ocasiones, bajo la tutela de alguno de los mayores en la familia o la comunidad, pero sin la formación que correspondía a los cantantes profesionales, como en la ópera. Los cantores, no obstante, solían y suelen, ser profesionales cuya presencia es un agradable agregado para hacer de ciertos rituales un evento adornado con algún grado de lucimiento. Karniol fue un cantor nacido en Polonia que trabajó en comunidades húngaras hasta cuando partió hacia Nueva York. En 1898 regresó a Europa y se ubicó en la localidad ucraniana de Odesa, pero con las masacres de 1905 huyó nuevamente a Nueva York. De Karniol quedaron algunas grabaciones, tan interesantes por lo que se alcanza a captar de su estilo personal, como por el trabajo de audición para adivinar lo que no logra escucharse, entre el ruido de los años y el de las posibilidades técnicas del momento. A partir de esas grabaciones, Judith Berkson elaboró el arreglo para Kronos. Se trata de la plegaria Danos la paz, que hace parte de la oración matutina en las congregaciones de las que Karniol fue parte. Es una invocación a la bondad divina, al amor, el bien y la paz. La arreglista es hija de un cantor de Chicago. Ella es compositora, pianista, acordeonista y cantante. Su ópera de cámara The Vienna Rite escenifica la colaboración entre Schubert y el cantor Sulzer en Viena en 1828, lo que dio origen a un particular modelo ritual en esa ciudad. Parece como si Meredith Monk y Steve Reich hubieran hecho síntesis en Berkson.

Penderecki ha escrito tres cuartetos de cuerdas. El primero lo estrenó el Cuarteto LaSalle en 1962 y quedó terminado en unos pocos días. Es una obra en un solo movimiento aunque pueden distinguirse claramente secciones separadas por las distintas técnicas unificadoras. En esta obra el compositor reunió todas las técnicas de ejecución históricamente poco convencionales para los instrumentos de arco y obtuvo una pieza que, como mucho de lo que ha compuesto Penderecki, está llena de dramatismo e intensidad expresiva. Los colombianos tuvieron a este compositor como director y maestro cuando vino en 2008. Se trata de una persona nacida dentro de la influencia soviética en Polonia, un católico devoto que se expresó en música sacra cuando todavía resultaba arriesgado hacerlo en su país. Tampoco dudó en componer para el Sindicato Solidaridad en momentos de restricciones políticas y de expresión. Penderecki es uno de muchos compositores que en el siglo XX derrotaron con su práctica lo que se consideró como un axioma de la música clásica, especialmente a partir de los años 60, cuando se puso de moda repetir que ese momento ya no era el de los grandes compositores, sino el de los grandes intérpretes, dando entender, a contramano de lo que escribían los compositores, que la creación musical ya no admitía nuevas obras.

Clint Mansell fue rockero antes de comenzar a escribir música para cine. Su nombre, como el de las piezas en este concierto, está estrechamente asociado con el del director cinematográfico Darren Aronofsky cuya cinta Requiem for a Dream presenta vidas paralelas destrozadas por las drogas en una paradoja entre drogarse para soñar y el plantearse metas insostenibles soportadas por las drogas. La música de Mansell se integra a la cinta de forma que, salvo por elementos rítmicos importantes, poco puede apreciarse si se la separa de las escenas cinematográficas. No obstante, el arreglista David Lang le entregó a Kronos un material sobresaliente. Lang es compositor y maestro y uno de los tres cofundadores y directores de la agrupación de música contemporánea Bang on a Can, fundada en 1987. De hecho, Kronos fue el intérprete de parte de la música que se escucha en la película, misma que Lang arregló en el estudio para que Kronos la ejecutara.

Laurie Anderson es un nombre corto para una mujer con una larga trayectoria que se ha desempeñado en las artes, con énfasis en la música. Compone, actúa, esculpe, diseña instrumentos musicales, se relaciona con el cine y la TV, ha sido rockera y colabora con escritores, músicos y artistas visuales. En numerosas oportunidades ha trabajado con su compañero, el músico Lou Reed. Ellos se conocieron en los años 70 y se casaron en 2008 cuando ella tenía 60 y el 66. Al final de su álbum Homeland, que le tomó de 2001 a 2010, aparece Flow, en la que Anderson ejecuta uno de los violines sintetizadores de su creación. El arreglista Jacob Garchik comenzó a hacer arreglos para Kronos en 2006 y ha contribuido con más de 30 piezas que incluyen varias de Anderson. Además de compositor, Garchik toca el trombón, con el que ha participado con notables músicos de jazz. También compone y usa el computador como instrumento musical y sonoro.

John Zorn ha tenido una larga historia con el saxofón, uno de los varios instrumentos que ejecuta. Es compositor, arreglista y fundador de su propio sello musical, Tzadik. La música del compositor argentino Mauricio Kagel, que algunos estudiosos (Morgan, por ejemplo, en su Twentieth Century Music) nombraron como uno de los tres más grandes de la segunda mitad del siglo XX, puso a Zorn en el camino de la experimentación sonora y musical. Un año después, en 1969, el jazzista y experimentador Anthony Braxton le proporcionó nuevas inquietudes. Su primer homenaje sonoro al cine le aportó una pieza a Kronos. Zorn ha tocado junto a sobresalientes jazzistas de los Estados Unidos en un estilo lleno de elementos de la música occidental de tradición académica, lo mismo que del rock. Ha escrito música para cine, video y animación. Desde 1992 ha aportado música para la serie Filmworks en la que se exploran temas como el de la ortodoxia religiosa judía frente a sus practicantes homosexuales, la vida de los emigrados judíos refugiados en Shangai durante el nazismo, el antisemitismo estadounidense tras los ataques a las Torres Gemelas y las obras en yidis del escritor Sholem Aleijem, entre otros temas. The Dead Man es una obra en 13 fragmentos que el compositor considera que sería apropiada como banda sonora para una película de tema sadomasoquista. El fragmento más extenso es Nocturne, de apenas 1:40 y el más corto, Etude, de apenas 0:40, duraciones que había practicado Anton Webern en la primera mitad del siglo XX, precisamente en composiciones para cuarteto de cuerdas.

Jerry García murió a los 53 años. A su temprana muerte contribuyeron años de abusos con drogas complementados por una alimentación a base de comida malsana que trató de compensar haciéndose vegetariano junto con el hábito, del que se ufanaba, de no haber hecho ejercicio nunca. Este guitarrista de la legendaria banda de rock The Greateful Dead, era además la cara eternamente sonriente dentro y fuera del grupo. A Jerry lo crió su abuelo gallego, tras la muerte por ahogamiento de su padre, que Jerry presenció a los 5 años de edad. Un año antes, su hermano le cercenó accidentalmente un par de falanges de un dedo de la mano derecha con un hacha mientras cortaba leña. Esto no le impidió a Jerry tocar guitarra eléctrica, ni llegar a ser un virtuoso del banjo. García sentía enorme atracción por las películas de terror que le inspiraban un miedo alucinante del que disfrutaba mucho. En 1986 durante un coma diabético que duró 5 días, se vio como protoplasma mientras se percibía en gran estado de agitación y actividad, debatiéndose en una lucha abordo de una nave espacial futurista con presencias insectoides. Luego de esto debió reaprender a tocar música. La pieza original de la que parte el arreglo en este concierto, tiene una letra de significado muy hermético cantada por García y acompañado de su guitarra eléctrica en un sustrato sonoro denso. Algunos seguidores de The Dead dicen que la pieza es maravillosa, pero imposible de soportar.

John Oswald es un compositor, bailarín y artista escénico. Trabaja con medios electrónicos y digitales y ha desarrollado un estilo en el que toma fragmentos de producciones musicales ajenas para reensamblarlas en lo que podría llamarse como saqueofonía o citas de audio. Este procedimiento ya lo llevó a enfrentar líos legales en los que salió perdedor y que terminaron en la destrucción de una producción completa que contenía citas de Michael Jackson. Como no cree en la propiedad del sonido lanzado al público, retornó a trabajar en ese mismo material y lo puso nuevamente en circulación. Esta vez, nadie consiguió frenarlo y ha seguido su trabajo dentro y fuera del laboratorio, las salas de concierto y en espacios públicos no convencionales. Spectre es el primero de sus cuatro cuartetos de cuerdas. Los tres primeros los escrbió para Kronos. En Spectre para 1001 reflexiones de cuarteto de cuerdas, todos los instrumentos han sido grabados por miembros de Kronos que agregan en vivo sus propias reflexiones. La elaboración de la pieza es un largo proceso que se desenvuelve en un tiempo comprimido durante su ejecución. Dice Oswald que la obra es análoga a lo que hace el registro instantáneo de la fotografía respecto del transcurso del tiempo.

Hay encuestas que ubican a Café Tacvba como la segunda banda de rock en español más importante para el público latinoamericano. La relación de Kronos con Tacvba viene del trabajo conjunto que hicieron en 1999 para la versión instrumental de la canción La Muerte Chiquita del CD Revés/Yosoy de Tacvba. Luego, en 2002 Kronos terminó su trabajó de inspiración mexicana que publicó en un CD con el título de Nuevo. Allí aparece 12/12 de Tacvba, con el arreglo del compositor argentino Osvaldo Golijov. Es frecuente que Tacvba componga música que contiene numerosas capas sonoras, como en una imagen en múltiples planos en los que la atención del oyente logra percibir que la complejidad del resultado es producto de una suma de elementos dispares que adquieren coherencia por su interacción simultánea. A los sonidos grabados se sobrepone el trabajo en escena de Kronos y entre ellos se encuentran los que traen al escenario a los pueblos originarios de este continente. 12/12 se refiere al día de la virgen de Guadalupe y es como un corte sonoro transversal que recoge diversos momentos de la celebración guadalupana.

Bryce Dessner es el compositor residente de la ciudad holandesa de Eindhoven donde se dan cita todo tipo de manifestaciones musicales de todos los géneros que pueden caber a lo largo de una temporada de eventos. Allí se presentan desde la totalidad de la obra de Bach, a desarrollar a lo largo de 10 años, hasta pop, Beethoven, jazz, salsa, fado, música infantil… Dessner se graduó como guitarrista clásico en Yale University y es miembro de la banda de rock indie The National. Dessner es el fundador y curador del MusicNOW Festival de obras contemporáneas. Ha trabajado en múltiples oportunidades con Kronos. Tenebre es un cuarteto de cuerdas que cuenta con la voz pregrabada del cantante Sufjan Stevens. La obra se basa en la tradición del Oficio de Tinieblas de la Semana Santa en que al atardecer se cumple con un ritual en el que se van apagando una a una las únicas 15 velas que iluminan el recinto hasta llegar a la total oscuridad. Dessner invirtió el procedimiento para ir de la oscuridad a la luz.

Tashwish, es una palabra multívoca del árabe que, según el contexto, puede significar desdibujar, causar interferencia, borrar los límites e incluso, regar rumores. Es el título de la pieza del colectivo rapero palestino Ramallah Underground. El trío, aunque en ocasiones participan más integrantes, rapea en árabe y combina varios estilos del género junto con elementos de la música tradicional del Medio Oriente. Sus presentaciones tienen lugar especialmente en Palestina dentro de la Zona Ocupada conocida como West Bank, pero han participado o actuado en Australia, Europa y los Estados Unidos. La circulación de su música corre por internet y no han hecho lanzamientos “oficiales” como lo harían los que han firmado con disqueras. David Harrington, violinista de Kronos, los contactó a través de la página de MySpace de Ramallah Underground y de allí resultó el encargo de Tashweesh. Este grupo palestino ha comenzado a integrar el uso de videos a sus presentaciones en una combinación de sonido, palabra e imagen que atrae una visión renovadora, joven y contemporánea de Palestina. Se debe tener en cuenta que algunos sectores armados en Palestina, particularmente en la franja de Gaza, han considerado el rapeo como una infiltración foránea en su cultura y lo han prohibido.

 

 

Las notas realizadas por Ricardo Rozental para los programas de mano se elaboran por solicitud del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo a quien pertenecen la totalidad de los derechos patrimoniales: www.teatromayor.org